Mayordomía cristiana es el reconocimiento de que todo es de Dios; de que El ha puesto algunas cosas en nuestras manos y que nosotros somos responsables en administrar esto, devolviéndole a Dios en adoración y servicio. En realidad nada es nuestro; todo pertenece a Dios. El es Creador y Sustentador de todo. El debe, pues, ocupar el centro en todo. El principio de la mayordomía significa que: cuanto soy, cuanto tengo y cuanto puedo es por Dios y para Dios.
Mayordomo, es la persona que ejerce administración sobre los bienes que un dueño le confía.
- OIKONOMOS –MAYORDOMO) Gerente Administrador Supervisor Tesorero
- OIKONOMIA –MAYORDOMIA Relación especial entre Dios y el hombre.
Dios nos hace responsables a nosotros por: la vida, personalidad, habilidades, oportunidades, responsabilidades, y posesiones. Tiempo Talento Tesoro.
Su Señor le dijo: “Bien, siervo bueno y fiel; sobre poco has sido fiel, sobre mucho te pondré; entra en el gozo de tu señor.”Mateo 25:21
I DIOS ES DUEÑO ABSOLUTO. “De Jehová es la Tierra y su plenitud; el Mundo y los que en él habitan” – Salmo 24:1; “Mía es la plata y mío es el oro, dice Jehová de los ejércitos” – Hageo 2:8; “He aquí que todas las almas son mías; como el alma del Padre, así el alma del Hijo es mía…” – Ezequiel 18:4.
Desde el principio la Biblia enfatiza la posición divina: Todo es de Dios. Nada es nuestro. En el capítulo I de Génesis encontramos 31 versículos y 31 veces está registrada la palabra Dios, en el capítulo II, 13 veces más, haciendo un total de 44 veces Dios. Dios, Dios, Dios, ¿Por qué tanta repetición? ¿Se equivocó Moisés cuando escribía? ¡NO! Dios puso su sello en la creación, todo sigue siendo de Dios. Mas o menos tres mil quinientos años más tarde, Dios sigue reclamando lo suyo y en el Salmo 50:10-12; dice: Porque mía es toda bestia del bosque y los millares de animales en los collados, conozco a todas las aves de los montes y todo lo que se mueve en los campos me pertenece; mío es el mundo y su plenitud. Hageo 2:8; dice: Mía es la plata, y mío es el oro, dice Jehová de los ejércitos.
II EL HOMBRE ES SOLO UN MAYORDOMO. Nacemos para administrar lo que es de Dios. Dios lo colocó al hombre para administrar sus obras. Fructificad-Multiplicad-Señoread la tierra, que labrara y cuidara el huerto, que pusiera nombre a los animales y esta mayordomía continúa hasta el día de hoy y llegará el día que rendiremos cuenta de todo lo que El nos dio para administrar: Sea mucho o sea poco. Sea bueno o sea malo. David, era un buen mayordomo y así lo expresa en el Salmo. 8 Cuando veo tus cielos, obra de tus dedos, la luna y las estrellas que Tú formaste… Digo: ¿Qué es el hombre y el hijo del hombre para Tu lo visites? Le hiciste señorear sobre las obras de Tus manos, todo lo pusiste debajo de sus pies.
III LAS RIQUEZAS QUE DIOS NOS DIO PARA ADMINISTRAR. ¿Dónde comienza la administración?
EN NUESTRO PROPIO SER: ¿O ignoráis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, el cual está en vosotros, el cual tenéis de Dios, y que no sois vuestros? Porque habéis sido comprados por precio; glorificad, pues, a Dios en vuestro cuerpo y en vuestro espíritu, los cuales son de Dios.1 Corintios. 6:19-20;
EL CUERPO: Hoy es el templo del Espíritu Santo. Debemos cuidarlo, mantenerlo saludable y limpio, darle comida sana y descanso, ejercitarlo, tratarlo bien y vestirlo con sencillez.
LA MENTE: Llenarla con pensamientos sanos, buenos libros para no estar alterados y llenos de temor; ocupa tu mente en lo que grada al Señor. “Mente desocupada oficina de Satanás”
EL ESPÍRITU: Es la parte más importante de nuestro ser y la que menos atendemos. Debemos sacar músculos a nuestro ser interior. Aunque nuestro cuerpo se va desgastando, nuestro espíritu se renueva día a día, 2 Cor. 4:16.
Dios nos ha dado riquezas para desarrollarnos:
- El Espíritu Santo: Nos da fuerzas, dones y ministerios, Hch. 1:8;
- La Biblia: Un gran tesoro inspirado por Dios, Jn. 5:39;
- La Iglesia: Donde no debemos dejar de congregarnos, He.10:25:
- La Oración: Arma poderosa en nuestras manos, 1 Tes.5:17;
Debemos administrar el tiempo que Dios nos da: aprovechando bien el tiempo, porque los días son malos. Efesios 5:16;
IV MAYORDOMÍA DE LOS BIENES. Toda riqueza que tengamos, desde un vaso de agua, hasta una propiedad son de Dios y nosotros debemos administrarlos con sabiduría, poniéndolas a disposición del Señor.
¿Qué es el dinero? Es la expresión de los bienes. Todo capital o bien se traduce en dinero. El dinero expresa el capital poseído. El dinero expresa el valor del bien. ¿Qué representa el dinero? Trabajamos una cantidad de horas por día, gastando tiempo y vida ¿Para qué? Para recibir un sueldo o jornal. Es parte de nuestra vida; invertimos tiempo, para recibir dinero. El dinero representa vida. Cuando damos dinero, damos parte de nuestro tiempo y vida. ¿Condena la Biblia ganar dinero? ¡NO! Pero si enseña que debemos ganarlo con honradez, Tito 1:7; No debemos desperdiciar las oportunidades que Dios nos da, Pr. 10:22, ¿El dinero es la raíz de todos los males? ¡NO! El amor al dinero si lo es, 1 Tim. 6:7 ¡Cuidado! Porque los que quieren enriquecerse caen en tentación y lazo y son traspasados de muchos dolores. No te afanes en hacerte rico; se prudente y desiste. Pr. 23:4. El dinero está bien puesto en la billetera, pero mal puesto en el corazón.
El crecimiento material debe ir acompañado con el espiritual, Job.1:1-3; nunca debemos recurrir a tácticas mundanas para hacer más dinero. Dios quiere bendecirte y lo prueba con Isaac, Gn. 26:3.12-14 (Sembró y cosechó… Ciento por uno)
¿Cómo administrar lo que Dios nos da?: Un buen mayordomo pide a Dios sabiduría para gastar. Jesús enseñó sobre economía: Junten lo que sobró para que no se pierda nada, Jn. 6:12; Debemos ayudar a otros con la abundancia que Dios nos da, Is. 58:7-10; Stg. 2:15-17; Hay pobres que serán siempre pobres, gastan todo y luego piden prestado. Hay que comprar lo que realmente necesito
DIOS QUIERE MAYORDOMOS HONRADOS ¿Cómo reconocer nuestra mayordomía? ¡¡¡Dando al dueño lo que al dueño le pertenece!!! No somos buenos mayordomos porque decimos o pensamos que lo somos, sino que lo seremos solo cuando lo cumplamos. Toda persona que toma un mayordomo hace un contrato con él. Este contrato puede ser 50% y 50% o 70% y 30%. ¿Existe algún contrato entre nosotros y Dios? ¡SI! Dios hizo un convenio en épocas pasadas con el hombre, exactamente en la época patriarcal. Luego lo afirmó en la ley y en la gracia nos dejó el mismo ejemplo.
A- ÉPOCA PATRIARCAL. Primeramente los hombres se acercaban a Dios a través de ofrendas, Dios enseñó a Adán y luego su hijo Abel agradó a Dios. En el cap.14 del Génesis, Abram le dio a Dios una porción definida. Lógicamente… No lo inventó Abram, Dios le inculcó a su siervo un convenio o contrato de dueño a mayordomo. En otras palabras Dios le habría dicho algo así: El 90% para ti y el 10% para mí. ¡¡¡Qué bueno es Dios!!! El pone todo y lleva el mínimo, nosotros no ponemos nada y llevamos el máximo. Abram le dio el diezmo a Melquisedec, nosotros tenemos a uno más grande que Melquisedec… Y es ¡Cristo Jesús! Luego en el Cap. 28 de Génesis, Jacob nieto de Abram promete a Dios la misma porción (diezmo) pues lo había aprendido de sus padres, como algo establecido por Dios y con mucha lógica. Los mandamientos o pactos eran una sucesión de padres a hijos.
B- ÉPOCA DE LA LEY La ley apareció 430 años más tarde desde Abram, ¿Por qué apareció la ley? Fue por causa de los transgresores y desobedientes a los convenios y pactos de Dios con el hombre, Gal. 3:17-19;. Cada uno hacía como bien le parecía. ¿La ley inventó los diezmos? ¡NO! Solo los hizo obligatorios, Lv. 27:30-32. ¿Por qué será que algunos dicen: Yo no doy el diezmo porque eso es cosa de la ley…? Si los hombres hubieran sido fieles como Abram… La ley nunca hubiese aparecido. Recuerde: la ley no inventó los diezmos, solo los hizo obligatorios. La ley tuvo un período, apareció y desapareció, tú y yo somos mayordomos de Dios, antes de la ley, durante la ley y después de la ley, todo sigue siendo de Dios. Además, si alguien quería usar por algún tiempo el diezmo que era de Dios (por una emergencia) al devolverlo, tendría que agregar la 5ta. Parte es decir, un 20% de intereses, Lv. 27:31; Y si alguno quisiere rescatar algo del diezmo, añadirá la quinta parte de su precio por ello.
C- ÉPOCA DE LA GRACIA. En los días de Jesús: ¿Pagó Él los diezmos? ¡¡¡SI!!! De otra manera hubiese sido acusado por los religiosos de su época, quienes lo perseguían para enterarse en qué infringía la ley. En esta época los fariseos eran fanáticos en dar el diezmo, no solo de lo que ganaban, sino también de la menta, el eneldo y el comino, Mt. 23:23. Jesús dio a entender que había que pagarlos, y dijo: a César lo que es del César y a Dios lo que es
de Dios, Lc. 20:25. En los días de Jesús no se habló mucho del diezmo porque lo daban con jactancia y lo decían públicamente como aquel que oraba en la congregación: Ayuno 2 veces por semana… Doy diezmo de todo lo que gano, Lc. 18:12;.
En nuestros días hay mucha discusión. ¡Cuántos pastores hacen lo inverosímil para juntar una ofrenda! Hay que tocar los sentimientos, otros recurren a la venta de empanadas, bizcochos o tortas, viajes, excursiones, mercados de pulgas, comidas… Hay congregaciones en las que se percibe más el olor a frituras, que al aroma de la presencia del Espíritu Santo. Dios sigue diciendo: Probadme y veréis, Mal.3:10.
- •Diezmo Es la prueba de Mayordomía
- •Ofrenda Es la prueba de amor
- •Diezmo No es lo que uno siente dar
- •Ofrenda Es lo que uno siente dar
Sabía Usted Que 15 de las33 parábolas son sobre el dinero. Más se encuentra en el Nuevo Testamento de dinero que del cielo e infierno juntos. 5 veces más se menciona dinero que oración. Se encuentran más de 500 versículos en oración y fe Hay más de 2,300 versículos sobre dinero y posesiones
V MAYORDOMIA DE LA FAMILIA. Plan de Dios sobre el matrimonio y la familia.
“Al principio… los creó varón y hembra” (Mt 19:4). “Por eso dejará el hombre a su padre y a su madre se unirá a su mujer y serán una sola carne” (Génesis 2:24).
MAYORDOMÍA DE LAS CAPACIDADES: Cada persona posee aptitudes especiales. Cada talento puede ser usado para glorificar, ya sea al que lo posee o a su dador original
Debiéramos cultivar los dones que el Espíritu Santo le concede a cada uno de nosotros, con el fin de multiplicarlos (Mat.25:14-30). Los buenos mayordomos usan liberalmente sus dones con el fin de producir mayores beneficios para su amo.
MAYORDOMÍA DEL TIEMPO: Como fieles mayordomos, glorificamos a Dios al usar sabiamente nuestro tiempo. (Col.3:23,24). Como Jesús debemos ocuparnos en los negocios de nuestro Padre (Luc.2:49). Por cuanto el tiempo es el don de Dios, cada momento es precioso. Cuando, en la creación, Dios nos concedió el tiempo, se reservó el séptimo día sábado como un periodo sagrado para la comunión con él. Pero se proveyeron seis días para que la familia humana se ocupara las actividades útiles.
CONCLUSIÓN: No debemos considerar el dar como un deber, sino como un ¡privilegio! Del que gozan aquellos mayordomos honrados que dan. No somos buenos mayordomos porque lo pensamos o lo decimos, lo seremos cuando lo cumplamos, dando al Dueño lo que le pertenece. “Cada uno dé como propuso en su corazón: no con tristeza, ni por necesidad, porque Dios ama al dador alegre. Y poderoso es Dios para hacer que abunde en vosotros toda gracia, a fin de que, teniendo siempre en todas las cosas todo lo suficiente, abundéis para toda buena obra;” 2 COR. 9:7-8;
Gracias!…doy gracias a Dios por su vida disfrute la lectura de su estudio ,en verdad gracias!!! compartire con muchos esta magnifica y profunda enseñanza.
DIOS LO.BENDIGA!