/El pecado en la sociedad actual

El pecado en la sociedad actual

Los filósofos y la gente en la calle han influido en una u otra manera en que nuestra sociedad tenga una percepción equivocada sobre el pecado. ¿Qué piensa el mundo actual sobre este Tema y que dice la Biblia al respecto? La cultura moderna ha intentado negar el pecado en todas sus dimensiones y sus efectos. Sin embargo, no ha conseguido evitar la angustia del hombre que se advierte limitado y no encuentra en la sociedad y en sus recursos humanos los medios suficientes para salir de esta situación.

El pecado es real y sus efectos también. La cultura actual, en sus aspectos más visibles y ostentosos, trata de anular la existencia del pecado y sus efectos. Sin embargo la antropología cristiana reconoce que el hombre tiene una naturaleza pecaminosa heredada por la realidad del pecado original. La historia humana y del hombre en general, no se comprende sin tratar la presencia del pecado y su consecuencia en el pasado, presente y futuro.

A las nuevas generaciones se les enseña que la historia del pecado es sólo un mito que impide el conocimiento de la realidad; al respecto Martín Lutero dijo: “la expresión más profunda del pecado está en no reconocernos pecadores”. La filosofía moderna sobre este tema dice, no existe el pecado, no existe consecuencia, al no haber pecado, entonces no existe el cielo como lugar de recompensas, ni el infierno como lugar de castigo, al negar lo anterior terminan negando la existencia de Dios.

Esto es muy cómodo porque el siguiente paso es aplicar la filosofía, si no existe Dios, ni cielo ni infierno, entonces viva la vida desenfrenada. Una gran mayoría vive de acuerdo a esta filosofía y he aquí la consecuencia en la que se encuentra nuestro mundo. Al no haber temor a Dios entonces se tira al tacho de la basura todos los principios morales, los valores, el respeto a los demás inspirados en la Biblia, si no existieran leyes civiles viviéramos en el imperio del más fuerte, del más sabido.

Otros manifiestan que la muerte es el fin de todo, su filosofía por lo tanto es: comamos y bebamos porque de cierto moriremos. El apóstol Pablo ya lo dijo en su tiempo:” 32 Si como hombre batallé en Éfeso contra fieras, ¿qué me aprovecha? Si los muertos no resucitan, comamos y bebamos, porque mañana moriremos. 1 Corintios 15:32; Pero anteriormente el vs. 20 ya había dicho: “20 Mas ahora Cristo ha resucitado de los muertos; primicias de los que durmieron es hecho.” La muerte no es el fin de todo.

Las consecuencias. Gente sin propósito en la vida. No se preparan para los aspectos más importantes de la misma. La familia, el hogar, viven en la mediocridad, sin esperanza, sin futuro, la vida entonces no tiene importancia ni sentido, se desbordan las pasiones humanas, guerras, carnalidad, esclavitud. Al no existir valores ni respeto a los demás lleva a una sociedad como la que vemos hoy entregada a todo tipo de manifestaciones del pecado La realidad. El que práctica el pecado es esclavo del pecado. 34 Jesús les respondió: De cierto, de cierto os digo, que todo aquel que hace pecado, esclavo es del pecado. Juan 8:34;

1. RUPTURAS DEL HOMBRE EN SUS RELACIONES FUNDAMENTALES. El pecado hace que el hombre se niegue a someterse a Dios, Cuando esto sucede su equilibrio interior se rompe y se desatan dentro de sí contradicciones y conflictos. Desgarrado de esta forma el hombre provoca casi inevitablemente una ruptura en sus relaciones con los suyos, familia, la sociedad y con el mundo creado.

El pecado, y su dinámica destructiva produce cuatro graves rupturas en las relaciones fundamentales del ser humano.

  • La ruptura con el mundo creado, la naturalez
  • La ruptura consigo mismo
  • La ruptura con sus semejantes
  • La ruptura con Dios

I RUPTURA DEL HOMBRE CON LO CREADO. 19 Porque el anhelo ardiente de la creación es el aguardar la manifestación de los hijos de Dios. 20 Porque la creación fue sujetada a vanidad, no por su propia voluntad, sino por causa del que la sujetó en esperanza; 21 porque también la creación misma será libertada de la esclavitud de corrupción, a la libertad gloriosa de los hijos de Dios. 22 Porque sabemos que toda la creación gime a una, y a una está con dolores de parto hasta ahora; 23 y no sólo ella, sino que también nosotros mismos, que tenemos las primicias del Espíritu, nosotros también gemimos dentro de nosotros mismos, esperando la adopción, la redención de nuestro cuerpo. Romanos 8:19-23;

El hombre, en lugar de administrar con cuidado la obra creada por Dios, la explota y manipula olvidando que el mundo no hubiera sido creado especialmente para él, para que viva en ella en armonía y paz.

Algunos ejemplos como consecuencias del mal uso o maltrato a la naturaleza:

  • El agotamiento de muchos recursos vitales para la humanidad, a consecuencia de su dilapidación o de su destrucción.
  • La excesiva emisión de CO2, y que producen efectos como el calentamiento global, entre otros.
  • La falta de agua y alimento en muchas regiones del planeta, por una equivocada distribución y cuidado de los bienes.
  • La deforestación indiscriminada.
  • La contaminación de mares y ríos.
  • El exterminio de especies animales y vegetales.
  • El consumismo y acumulación de bienes que lleva a querer tener más de lo que realmente necesitas.
  • El ensuciar la calle de distintas maneras.

II RUPTURA CONSIGO MISMO. 15 Porque lo que hago, no lo entiendo; pues no hago lo que quiero, sino lo que aborrezco, eso hago. Romanos 7:15; La ruptura consigo mismo es una consecuencia de la ruptura con Dios. Al alejarse el hombre de Dios, se aleja de su propia identidad, y de Aquel que no solamente sabe de nosotros, sino que nos conoce desde siempre.

Muchas veces no sabemos quiénes somos; vivimos en un conflicto interior con miedos e inseguridades, nos sentimos solos y frustrados, no nos aceptamos y pasamos a vivir en la mentira existencial. Hacemos cualquier cosa para sentirnos importantes, queridos, valorados y felices. Frente a todo esto, también hay aquellos que reaccionan negativamente, con pesimismo o evaden la realidad. Éstas son algunas manifestaciones de la ruptura consigo mismo, pues el hombre, en lo más profundo de sí, busca responder a la pregunta existencial ¿Quién soy? Sin embargo, al estar alejado de su Creador y de sí mismo, no puede responderla correctamente.

ALGUNOS EJEMPLOS DE RUPTURA CONSIGO MISMO:

  • La falta de conocimiento y valoración personal.
  • Egoísmo.
  • El culto al cuerpo, es un engaño…. (Exceso de dietas, anorexia, cirugías plásticas, etc. es un engaño)
  • Los placeres de alcohol y drogas, es un engaño
  • El placer del sexo, es un engaño.
  • El placer de los bienes materiales, es un engaño (Cundo muero que me llevo)
  • El placer de los viajes
  • El placer del conocimiento. (Profesando ser sabios se hicieron necios.)
  • El vivir con máscaras.
  • Caer en depresión. Las personas acuden en mayor número a psiquiatras y psicólogos.
  • El número creciente de suicidios.
  • La constante soledad en que se vive. Las personas buscan escapar de su soledad de distinta manera, drogas, sexo, alcohol, televisión, internet, video juegos, casinos. Sin Dios, el ser humano cae en la trampa del engaño del pecado.

III RUPTURA DEL HOMBRE CON SUS SEMEJANTES. 8 Y DIJO Caín un su hermano Abel: salgamos al campo. Y Aconteció Que Estando Ellos en el campo, Caín se levantó contra su hermano Abel, y lo mató. Génesis 4:8; Al perder el respeto a la dignidad humana, se desatan los mayores abusos contra la persona que se hayan conocido: genocidios, guerras, violación de los derechos humanos, pobreza, injusta distribución de los bienes materiales, aborto, tráfico de blanca, el imperio y comercio de la pornografía, entre otros. El pecado es un engaño destruye el presente y el futuro de la sociedad.

ALGUNOS EJEMPLOS DE RUPTURA CON LOS DEMÁS:

  • La difícil tarea de tener verdaderos amigos a pesar de tener “muchas amistades”.
  • El temor al compromiso con el otro.
  • El egoísmo, y la falta de solidaridad.
  • El hablar mal de los demás, el chisme.
  • La infidelidad.
  • El exceso de trabajo que produce que se desatiendan los momentos familiares.
  • El maltrato a los hijos que se puede dar física y mentalmente.
  • Muchos matrimonios van cayendo en un proceso de ruptura.
  • El aborto, que refleja como la vida de un nuevo ser humano puede ser vista como un obstáculo para la propia felicidad, por lo que debe ser eliminada.
  • Madres y padres que, en nombre del derecho a la propia felicidad, se alejan, abandonando incluso a niños pequeños.

IV RUPTURA CON DIOS. 9 Mas Jehová Dios llamó al hombre, y le dijo: ¿Dónde estás tú? 10 Y él respondió: Oí tu voz en el huerto, y tuve miedo, porque estaba desnudo; y me escondí. Génesis 3:9-10; La ruptura con Dios es la fuente y raíz de las demás rupturas. Es la clara manifestación del deseo del ser humano de ser como Dios, de bastarse a sí mismo, de prescindir de Dios, de construir un mundo de espaldas de su Plan de Amor. En el pasado nos narra la Biblia que cuando el hombre rompió con Dios y no lo tuvieron en cuenta vino el diluvio, la confusión de lenguas en la torre de babel, la destrucción de Sodoma y Gomorra, entre otras. En cuanto el futuro la Biblia dice cómo será el Carácter de los hombres en los postreros días: También debes saber esto: que en los postreros días vendrán tiempos peligrosos. 2 Porque habrá hombres amadores de sí mismos, avaros, vanagloriosos, soberbios, blasfemos, desobedientes a los padres, ingratos, impíos, 3 sin afecto natural, implacables, calumniadores, intemperantes, crueles, aborrecedores de lo bueno, 4 traidores, impetuosos, infatuados, amadores de los deleites más que de Dios,… 13 mas los malos hombres y los engañadores Irán de mal en peor, engañando y Siendo engañados. 2 Timoteo 3:1-4,13;

Conclusión. A pesar de todo lo anterior Dios no deja de buscarnos. “He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él, y él conmigo”. Apocalipsis 3:20; El hombre necesita reconciliarse en primer lugar con Dios al hacerlo entonces podrá reconciliarse con la lo creado, consigo mismo, con sus semejantes. Usted que en esta mañana nos visita, no se vaya sin dar este paso que sin duda es el más trascendental de su vida. Oremos.