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¿Porqué Dios permite los terremotos?

Nuestro país tembló días atrás con el terremoto de 7,8 Mw, ocurrido el 16 de abril de este año 2016. Wikipedia dice al respecto: El terremoto de Ecuador de 2016 fue un movimiento sísmico ocurrido a las 18:58 ECT del 16 de abril de 2016, con epicentro entre las parroquias Pedernales y Cojimíes del cantón Pedernales, en la provincia ecuatoriana de Manabí.1 Con una magnitud de 7,8 Mw,4 constituye el sismo más fuerte sentido en el país desde el terremoto de Colombia de 1979, y el más destructivo desde los terremotos de Ecuador de 1987.5 Las ondas sísmicas llegaron al suroccidente de Colombia, sintiéndose en ciudades de ese país como Cali, Pasto, Popayán y Neiva;6 y a la frontera norte de Perú, en lugares como Tumbes, Piura, Cajamarca, Lambayeque y Amazonas”.7

Las réplicas continúan haciendo daño todavía. Frente a esta tragedia nacional surge siempre la pregunta ¿por qué Dios permite los terremotos? Permítanme en esta mañana presentar algunas respuestas de acuerdo a nuestro pasaje de la Biblia que hemos leído.

I PARA ANUNCIAR AL MUNDO SU PODER Y SU CONTROL

Porque así dice Jehová de los ejércitos: De aquí a poco yo haré temblar los cielos y la tierra, el mar y la tierra seca;  V.6;

A Dios no se le ha escapado el control de la historia de la humanidad, constantemente nos recuerda que el existe y nos llama la atención con estos sucesos esperando que la humanidad se arrepienta de sus pecados y se vuelva a Él. También nos recuerda que su segunda venida es real y que se aproxima este hecho glorioso que tanto esperamos. Veamos los siguientes textos bíblicos que confirman lo anterior.

26 La voz del cual conmovió entonces la tierra, pero ahora ha prometido, diciendo: Aún una vez, y conmoveré no solamente la tierra, sino también el cielo. 27 Y esta frase: Aún una vez, indica la remoción de las cosas movibles, como cosas hechas, para que queden las inconmovibles. Hebreos 12:26-27;

Miré cuando abrió el sexto sello, y he aquí hubo un gran terremoto; y el sol se puso negro como tela de cilicio, y la luna se volvió toda como sangre;  13 y las estrellas del cielo cayeron sobre la tierra, como la higuera deja caer sus higos cuando es sacudida por un fuerte viento.  14 Y el cielo se desvaneció como un pergamino que se enrolla; y todo monte y toda isla se removió de su lugar. Apocalipsis 6:12-14; 12;

19   Y daré prodigios arriba en el cielo, Y señales abajo en la tierra, Sangre y fuego y vapor de humo; 20   El sol se convertirá en tinieblas, Y la luna en sangre, Antes que venga el día del Señor, Grande y manifiesto; Hechos 2:19-20;

“E inmediatamente después de la tribulación de aquellos días, el sol se oscurecerá, y la luna no dará su resplandor, y las estrellas caerán del cielo, y las potencias de los cielos serán conmovidas. Entonces aparecerá la señal del Hijo del Hombre en el cielo; y entonces lamentarán todas las tribus de la tierra, y verán al Hijo del Hombre viniendo sobre las nubes del cielo, con poder y gran gloria”. Mateo 24:29-30;

Pero el día del Señor vendrá como ladrón en la noche. Entonces los cielos pasarán con gran estruendo, los elementos ardiendo serán deshechos y la tierra y las obras que en ella hay serán quemadas. Puesto que todas estas cosas han de ser deshechas, ¡cómo no debéis vosotros andar en santa y piadosa manera de vivir, esperando y apresurándoos para la venida del día de Dios, en el cual los cielos, encendiéndose, serán deshechos, y los elementos, siendo quemados, se fundirán! Pero nosotros esperamos, según sus promesas, cielos nuevos y tierra nueva, en los cuales mora la justicia.» 2 Pedro 3:10-13;

Entonces hubo relámpagos y voces y truenos, y un gran temblor de tierra, un terremoto tan grande, cual no lo hubo jamás desde que los hombres han estado sobre la tierra. Y la gran ciudad fue dividida en tres partes, y las ciudades de las naciones cayeron; y la gran Babilonia vino en memoria delante de Dios…, Apocalipsis 16:18-21:

Y oiréis de guerras y rumores de guerras; mirad que no os turbéis, porque es necesario que todo esto acontezca; pero aún no es el fin. 7 Porque se levantará nación contra nación, y reino contra reino; y habrá pestes, y hambres, y terremotos en diferentes lugares.
8 Y todo esto será principio de dolores.  Mateo 24:6-8;

II PARA ANUNCIAR QUE VENDRÁ EL DESEADO DE LAS NACIONES.

Y haré temblar a todas las naciones, y vendrá el Deseado de todas las naciones; y llenaré de gloria esta casa, ha dicho Jehová de los ejércitos. V 7

Dios anuncia la segunda venida de su hijo.

III PARA ANUNCIAR LA MANIFESTACIÓN DE SU GLORIA

La gloria postrera de esta casa será mayor que la primera, ha dicho Jehová de los ejércitos; V 9

Entonces una nube cubrió el tabernáculo de reunión, y la gloria de Jehová llenó el tabernáculo. 35 Y no podía Moisés entrar en el tabernáculo de reunión, porque la nube estaba sobre él, y la gloria de Jehová lo llenaba.

Éxodo 40:34-35;

10 Y cuando los sacerdotes salieron del santuario, la nube llenó la casa de Jehová.  11 Y los sacerdotes no pudieron permanecer para ministrar por causa de la nube; porque la gloria de Jehová había llenado la casa de Jehová. 1 Reyes 8:10-11;

14 Porque la tierra será llena del conocimiento de la gloria de Jehová, como las aguas cubren el mar. Habacuc 2:14;

4 Enjugará Dios toda lágrima de los ojos de ellos; y ya no habrá muerte, ni habrá más llanto, ni clamor, ni dolor; porque las primeras cosas pasaron. Apocalipsis 21:4;

IV PARA ANUNCIAR SU PAZ PARA LA HUMANIDAD

…y daré paz en este lugar, dice el Señor de los ejércitos.» V. 9

7 Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús. Filipenses 4:7;

La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo.  Juan 14:27;

Conclusión. Dios está llamando la atención de la humanidad alrededor del mundo, ahora nos tocó a nosotros. Cientos de muertos, miles de casas destruida y afectadas. Miles de compatriotas damnificados. Un país que se ha mostrado solidario dando ejemplo al mundo. El corazón de las personas se vuelve sensible a Dios por estas tragedias. Pero cómo siempre pasará y la gran mayoría no entenderá que Dios en su infinita gracia y misericordia nos está llamando al arrepentimiento. Oremos para que muchos respondan al llamado de Dios, sigamos como iglesia hoy más que nunca proclamando, que la segunda venida del Señor se aproxima. Amen.